Se trata de la evolución, o mejor dicho, “no-evolución” de uno de los menús de McDonalds, concretamente un Happy Meal…destinado al sector infantil para que crezcan “bien alimentados”. Tal y como muestran las dos fotografías posteriores, la apariencia externa de la hamburguesa y de las patatas es exactamente la misma 137 días después que en el momento de la compra-elaboración.
Las fotografías hablan por sí solas, y desde luego algunas de las declaraciones de responsables de McDonalds como que "La carne de nuestras hamburguesas no lleva conservantes añadidos", queda totalmente en entredicho, y más, teniendo en cuenta que los antecedentes de estudios similares, llegan a las mismas conclusiones.
Parece que desde la polémica aparición del documental “SupersizeMe”, son varios los intentos de dar a conocer las características “alimentarias” de los productos de la M: Karen Hanrahan mostraba una hamburguesa de McDonald's de 12 años de edad, sin apenas signos de ‘envejcimiento’; Nonna Joann en su blog publicó 'Happy birthday, happy meal', para celebrar el primer cumpleaños de un menú de la cadena comprado hacía un año…
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